Esto aumenta el número de fármacos que causan graves problemas de salud en comparación con el estudio anterior de 2008, que enumeraba sólo 17 medicamentos.
Las furanocumarinas, presentes en el zumo de pomelo, interfieren en la disolución normal de los fármacos y aumentan su toxicidad, afectando a sus niveles en el organismo. Esto puede provocar sobredosis de fármacos o efectos secundarios graves, como problemas cardiacos, insuficiencia renal, descomposición muscular, problemas respiratorios e incluso coágulos sanguíneos.
El estudio descubrió que la combinación de fármacos y zumo de pomelo puede ser peligrosa tanto para el paciente como para el médico, ya que puede dar lugar a resultados diferentes y distorsionar los resultados de las pruebas diagnósticas.
Por ello, los autores del estudio aconsejan tanto a médicos como a pacientes que actúen con precaución al utilizar estos fármacos.
«La probabilidad de muerte es pequeña, pero no hay que subestimar los riesgos» – explica uno de los autores del estudio, el profesor David Bailey. «Los médicos deben ser conscientes de que los nuevos fármacos que salen al mercado pueden tener un impacto negativo en la salud de sus pacientes. Los pacientes que tomen estos fármacos deben evitar el zumo de pomelo u otras bebidas que contengan este ingrediente.»
Entre los fármacos a los que hay que prestar atención se encuentran los analgésicos, las enfermedades cardiacas, la hipertensión arterial, así como algunos antidepresivos y medicamentos para la alergia.
Las conclusiones del estudio son importantes para pacientes y médicos de todo el mundo, ya que el zumo de pomelo es una bebida popular que se consume a menudo con medicamentos. Por lo tanto, las personas que toman medicamentos deben prestar atención a lo que comen o beben, sobre todo cuando toman medicamentos nuevos con los que no están familiarizados. Merece la pena tratar el tema con el médico, que puede ayudar a elegir la medicación adecuada y eliminar el riesgo de efectos secundarios graves.